Los vinos rosados son perfectos para el verano por su carácter fresco y ligero, con el que consiguen que notemos menos los efectos del calor y que podamos sobrellevar de mejor forma estos meses de mayor temperatura.

Los rosados son considerados como vinos de primavera-verano porque poseen menos graduación alcohólica y, además, se sirven a temperatura más baja que otros tipos de vinos. Con la subida de las temperatura al cuerpo le apetece un vino refrescante y aquí es donde hacen su aparición los rosados, que deben servirse a temperatura fría, entre los 4º C y 7 º C los más suaves, mientras que los más potentes pueden llegar a los 10º C.

Su consumo ha crecido el doble que el de los vinos blancos y tintos. Esto se debe a su apuesta por la calidad y versatilidad de aromas, colores y sabores.

Al vino rosado siempre le han acompañado infinidad de mitos falsos: que si es una mezcla de tinto y blanco, que si eran vinos para mujeres o que no eran fáciles de maridar.

¡¡¡Dejemos atrás estos mitos!!!  Y es que los rosados además de ser un perfecto aliado para refrescarnos en el periodo estival, son ideales, no solo para acompañar en aperitivos, sino para la mayoría de menús de verano, platos de pasta, arroces y comida asiática. Los  más afrutados pueden combinar perfectamente con mariscos o pescados y los que tienen algunos meses de crianza en barrica de madera armonizan perfectamente con carnes blancas y quesos semicurados.

El vino rosado consigue esa tonalidad clara debido a la corta maceración de los hollejos de las uvas. Se trata de un vino más ácido y de sabor más suave que el tinto, pero está repleto de matices que debemos de tener en cuenta a la hora de elegirlo como acompañamientos de los platos que vayamos a degustar.

En La Madreña Castellana tenemos a vuestra disposición una oferta de vinos rosados para todos los gustos y paladares.

Nuestra intención es que disfrutéis de la exquisitez de un buen vino rosado, realzando el sabor de nuestros elaborados platos y consiguiendo el maridaje perfecto. 

Las diferentes opciones que el restaurante La Madreña os propone es una apuesta segura con la que siempre acertaréis, nuestros favoritos: 

  • Miraval Rosé,  es uno de los rosados más vendidos de Francia. Proviene de la comarca de la Provenza. De un hermoso color rosa pálido, con reflejos brillantes y de  marcado carácter frutal es perfecto para compartir con alguna de nuestras ensaladas, como los brotes con cebolla crujiente, o con cualquiera de  nuestras carnes cocinadas a baja temperatura e incluso con algún postre, como nuestras filloas.
  • Roselito Rosado 2017, es uno de los mejores rosados que se elaboran en Ribera del Duero. Es un vino rosado que refleja la tradición y el patrimonio de la Ribera del Duero y que maridará a la perfección con nuestras exquisitas fabes con almejas de carril en salsa verde. 
  • Tombu 2016, Vino rosado D.O. Castilla y León. Su estancia en barrica, infrecuente en los rosados, lo hace todavía más especial. Sin duda un rosado diferente, con alma de tinto. Elegante, muy bien equilibrado y delicioso al paladar. Ideal para degustar con cualquiera de nuestras riquísimas tapas, como nuestra espectacular ensaladilla con marisco, o pescados, como nuestro afamado solomillo de bacalao al horno.
  • Vitheras Lucía, el  más novedoso e imprescindible en nuestra bodega, “vino asturiano” con  denominación de origen Cangas,  destaca por su bonito color piel de cebolla, límpido y brillante, de intensidad aromática destacable y muy buena acidez. Perfecto para platos untuosos y frescos como nuestra ensalada de temporada de pulpo y mango.

Pocos planes se acercan tanto a la perfección como aquellos que involucran una copa de vino rosado, una terraza y la mejor compañía. En el restaurante La Madreña, contamos con una elegante y acogedora terraza para que puedas disfrutar de una buena copa de vino rosado. 

Sin lugar a duda ¡¡los vinos rosados están de moda!!. Son agradables y frescos, por lo que se convierten en una elección perfecta para tomar durante el verano, pero,  gracias a su versatilidad y diversidad, se pueden saborear en cualquier época del año.